viernes, 17 de octubre de 2014

Los años 2000


La televisión española subió cambios drásticos en estos últimos años, debido en parte a la aparición más que evidente de la competencia. Ahora, el criterio básico consiste en satisfacer las demandas del público y tener el mayor número de audiencia. Por eso, las televisiones privilegian los programas dirigidos a ciertos consumidores para cada banda horaria. Es la razón por la que han desaparecido muchos programas minoritarios como, por ejemplo, el cine en blanco y negro o los programas infantiles de la tarde. Eso es lo que se llama la “guerra de audiencias”, el motor de las televisiones. Cada emisora incluso establece las tarifas de los anuncias publicitarios en función del número de telespectadores susceptibles de ver la televisión en cierto momento.
Los gustos del público también han cambiado. Mientras que en los años 1980, predominaban los largometrajes estadounidenses, en la actualidad, la balanza se inclina hacia los programas deportivos y las series. Sin embargo, siguen siendo en la actualidad los programas especiales como los debates electorales o las bodas reales.

En la actualidad, asistimos al paso a la televisión digital, relacionada con Internet. Los espectadores se convierten cada vez más en usuarios-consumidores y deben pagar los distintos servicios interactivos. Actualmente, el más importante es el video on demand, a saber la posibilidad de ver una película cuando se lo desea.

No hay comentarios:

Publicar un comentario